En torno a la salud del Presidente…

Ya he logrado adelantar algunas tareas de la universidad y decidí no ir a dormir antes de decir algunas cosas, será mi opinión en torno a lo que hoy escucho en las calles, a lo que veo en las noticias o programas de opinión, a lo que encuentro en la internet en relación a la salud del Presidente Venezolano. Antes no quise decir ni una pizca, soy sincera. Aunque eso no quiere decir que estaba de espaldas a la situación, yo la vivía y la sigo viviendo igual que todos los demás.

Hablaré como una persona, ¿es evidente no? porque soy una persona… ¡Y no un virus en la web! Cuando digo que hablaré como una persona  intento comunicar que hablo con real sentimiento humano, un sentimiento que debe estar despojado de todo tipo de parcialidad. Y justo ahora recuerdo a Jesús y su historia del buen samaritano. El Maestro relata a un interprete de la Ley el momento en que un hombre judío es agredido físicamente por ladrones mientras iba desde Jerusalén hacia Jericó. Este hombre es dejado junto al camino medio muerto, quizás sin muchas posibilidades de sobrellevar la situación sin la ayuda de alguien más. Junto a él pasa un sacerdote y también un levita, mas ninguno estuvo dispuesto a brindarle ayuda. Sin embargo, un samaritano (proveniente de Samaria) pasa junto al camino y se compadece de aquel herido; pronto le ayuda y hace todo lo que está en sus manos por mejorar la condición de aquel hombre… ¡Hasta paga a otra persona para que lo cuide hasta su regreso! (Lucas 10: 25-37). Esto es aun más relevante cuando sabemos que en aquel entonces Judíos y Samaritanos no establecían relaciones entre sí, ni la más mínima. Eso me hace afirmar que, evidentemente, nuestras parcialidades se desvanecen o deberían desvanecerse ante la realidad que está justo frente a nosotros.

El mundo entero ha seguido «de cerca» los acontecimientos de la enfermedad que ha tocado la vida del Presidente Hugo R. Chávez F., y seguramente la noticia de que debe someterse a una nueva operación ha llegado rápidamente a cada rincón de la tierra. ¿Pero para qué rueda esta información? ¿Se trata de preocupación, condolencia, apoyo, crítica o burla? Es evidente, las burlas son las que abundan, y las «fiestas» también. Desde el primer momento en que fue anunciado al país y, por tanto al mundo entero la necesidad de la primera intervención a la que debía someterse el Presidente, los chites tuvieron y siguen teniendo su tiempo de auge. He escuchado cosas que jamás imaginé… «Chávez tiene una bacteria, roguemos a Dios por la bacteria». En pocas palabras, el hombre no importa, importa más el causante del dolor de una familia o de un país. Me quedo fría ante tales planteamientos, ¿cómo es que llegamos a tanto? Quizás el ambiente y planificado año electoral 2012 aumenta considerablemente este tipo de reacciones.

Es probable que alguno diga… «Pues, esta que escribe seguro pensaba votar por Chávez en las elecciones presidenciales del mes de octubre». Pero, ¿qué tiene eso de malo? Nuestro país es democrático, tan democrático como lo fueron las primarias de la oposición.  Aunque, el punto ahora no es ese, el punto es hablar de nuestra actitud frente a lo que vive el actual Presidente. Y lo que él vive debería derrumbar todo deseo maligno, incluso si alguno que lee es candidato opositor o apoya esta corriente política. Estamos llamados a ser solidarios, compasivos, humanos… Y es que los humanos deberían amar, no odiar. Siempre pienso en la idea original que Dios tuvo para nosotros, malbaratada desde los principios de la creación  hasta ahora.

Nadie que hable de amor debería estar deseando mal. Nadie que hable de construir Patria debería estar deseando la muerte de Hugo Chávez. Nadie que hable de cosas buenas para Venezuela debería crear o difundir material de ningún tipo con el fin de crear confusión o burlarse de tan difícil situación. Recuerden que se trata de un venezolano, y nadie hace patria maltratando al ciudadano.

El Pa’ lante comandante no debería ser una consigna de apoyo del PSUV (Partido Socialista Unido de Venezuela), debería ser una consigna de Venezuela entera.

Que Chávez siga intentando vivir, y vencer…